Ante el reto de proteger el medio ambiente y de contribuir con la sustentabilidad del planeta sin sacrificar la seguridad de operación en los equipos eléctricos
, en Prolec hemos desarrollado un aceite de composición natural cuyas propiedades eléctricas, físicas y químicas son las adecuadas para servir como medio de enfriamiento y aislante eléctrico en transformadores de distribución y potencia.
En un sistema de transmisión y distribución de energía eléctrica, los transformadores son una pieza fundamental para el suministro a los usuarios finales. Para la operación de estos transformadores, habitualmente se empleaban aceites minerales derivados del petróleo, cuyas ventajas técnicas y de costos ampliaron su utilización.
Sin embargo, el impacto perjudicial que genera al ambiente es considerable y en cuestión de seguridad, su bajo punto de inflamación puede ocasionar percances e incluso riesgo de incendio.
Ante este panorama y la creciente necesidad de adoptar tecnologías, materiales y equipos más amigables con el ambiente, durante los primeros años de la década, comenzó el desarrollo de los fluidos dieléctricos de origen vegetal para su aplicación en transformadores inmersos en aceite, como una alternativa a los combustibles fósiles.
Desde hace más de una década, Prolec desarrolló y patentó el primer aceite vegetal dieléctrico en México llamado VG-100®, para uso en trasformadores de distribución y potencia. Las cualidades de la composición del fluido VG-100® hacen que Prolec pueda ofrecer no solamente productos superiores, sino soluciones ecológicas y sustentables.
El VG-100® es un fluido dieléctrico del tipo éster natural, obtenido a través de un proceso innovador para poder ser utilizado en transformadores. Este fluido fue desarrollado como una alternativa amigable con el medio ambiente, 100 por ciento natural y biodegradable sin antioxidantes sintéticos, aditivos o componentes tóxicos derivados del petróleo, cumpliendo así con estándares internacionales como ASTM & IEEE.
El VG-100® es un aceite 100% natural derivado de semillas de frijol de soya. Su composición química está basada en una mezcla de diferentes tipos de ácidos grasos y con un proceso de manufactura, mediante el cual se le dan las características y propiedades para su aplicación como fluido dieléctrico en transformadores.
En comparación con los aceites de origen mineral, el aceite VG-100 ® ofrece la ventaja de ser altamente resistente al fuego (alto punto de fuego), reduciendo así el riesgo de incendio de un transformador esto quiere decir que un transformador Prolec con VG-100® promete un alto nivel de seguridad en sus diversas aplicaciones como en el caso de instalaciones bajo techo.
Sin duda, la implementación de las composiciones ciento por ciento naturales es uno de los avances más significativos de la industria en materia de eficiencia energética. ¿Cómo es posible lograrlo? Gracias a la composición de aceites de ésteres naturales, ya que para su fabricación generalmente se emplean semillas de soya, maíz y girasol, así como otros productos agrícolas con aplicaciones industriales completamente biodegradables y con posibilidad de ser reciclados.
Las investigaciones siguen avanzando y aunque los fluidos minerales y naturales poseen diversas áreas de oportunidad, los segundos han ido ganando terreno en la industria eléctrica, considerando las ventajas tanto técnicas como ambientales que pueden ofrecer. A ello se suma al constante análisis de los países que cuentan con los recursos agrícolas necesarios para ser empleados como materia prima en la fabricación de fluidos dieléctricos de origen natural, frente al desafío de lograr precios más competitivos.
En Prolec trabajamos juntos para transformar con innovación y responsabilidad.
Diciembre 2016, por Redacción Revista Constructor Eléctrico / Prolec.